6/15/2016

Cómo leer este blog.

1. Este blog hay que leerlo en sentido inverso a como se visualiza para que tenga un orden cronológico tal como fue escrito y se entienda. A la derecha donde dice TEMARIO en forma numerada se encuentran los posts ordenados cronológicamente. Recomendamos que así sea leído para su mejor comprensión.
2. El haber tenido experiencias místicas, experiencias cercanas a la muerte y/o visiones espirituales no nos confiere NINGÚN GRADO DE SANTIDAD. Por el contrario quien escribe este blog debe luchar cada día para no alejarse del Camino y piensa que si no fuera por las experiencias que le tocaron vivir, su Alma quizá se hubiera perdido. "Donde abundó el pecado, sobreabundó la Gracia".
3. El único objetivo que tiene este blog es poder ayudar a alguien en su despertar espiritual a la Fe o lo que es aun más difícil: mantenerse en el Camino. Están invitados a participar de este blog todos aquellos que hayan tenido experiencias místicas, experiencias cercanas a la muerte o visiones espirituales. Si así desean hacerlo. Solo les pido que sea en forma anónima, con un apodo o primer nombre es suficiente.

XVII. Su Voz

Despierto una mañana escuchando esta melodía y Su cálida Voz que dice: "ÉSTE SOY YO".

XVI. Ese Amigo del Alma

Fede era un ser con una necesidad de Dios, como el mismo decía, asombrosa. Fue un compañero en la búsqueda espiritual desde la adolescencia hasta que partió de este mundo a los 42 años. Los buenos se van temprano, alguien ha dicho. La charlas con Fede podían ser interminables. Si yo era un "bicho raro", Fede me ganaba, en el buen sentido. Tenía una visión tan profunda de las cosas y tan trascendental que era un placer escucharlo y compartirla. Transitamos juntos el camino de la Meditación Hindú y construimos en su propia casa un mini templo para poder practicarla. Fede era un ser antimaterialista, detestaba el consumismo. Sus dos hijos tenían juguetes que ellos mismos, con la ayuda de Fede y su mujer, habían construido con sus propias manos. Fede tenía, como dije, una necesidad de Dios increíble. Fue, en el sentido estricto de la palabra, un Amigo del Alma, a quien sigo extrañando y espero volver a encontrar algún día en la Eternidad.

6/14/2016

XV. Divina Misericordia

A principios de los 90 y como consecuencia de las experiencia vividas desarrollé una gran devoción por la Virgen María. Esto me llevaba a realizar periódicos viajes a San Nicolás de los Arroyos donde una vidente, Glagys Motta, recibía mensajes de Ella. San Nicolás estaba repleto de comercios, ingresé a uno de ellos y vi una imagen que me atrapó, era la imagen de Jesús en Vos confío. Nada sabía respecto a esta devoción en aquel momento, solo atiné a comprarla y ponerla en un lugar destacado de mi hogar.
En los 3 o 4 años subsiguientes me tocaron vivir experiencias personales muy dolorosas que hicieron que me alejara de Dios. La Palabra había caído en un suelo que no estaba aún lo suficientemente fértil. Asimismo mi relación con mi padre terrenal se volvió muy distante. Él también estaba alejado de Dios.
A mediados de los 90 trabajaba dirigiendo un instituto en una universidad privada. Una tarde llega a mi despacho lo que parecía ser un matrimonio y me piden si podían conversar conmigo unos minutos, les dije obviamente que sí. Se sientan frente a mi en el escritorio y comienzan a poner sobre el mismo material que incluía la imagen de Jesús en Vos Confío. Me quedé helado, reconocía la imagen pero no entendía de qué se trataba esa "reunión". El hombre me mira y me dice: venimos a verlo porque usted es el "encargado de salvar el Alma de su padre". Les pregunté: ustedes conocen a mi padre? No personalmente, respondieron. Comprendí que esta pareja sabía sobre mi y mi padre mucho más de lo que me podía imaginar. Les pregunto qué debía hacer yo para ayudar a mi padre y me comienzan a contar sobre la Divina Misericordia y que mi padre debía rezar todos los días unas oraciones que en aquél momento no conocía: Coronilla de la Divina Misericordia, Oración de Consagración, Oración a Santa Faustina y a Jesús Misericordioso. No recuerdo en qué orden debía rezarlas.
Me dieron material impreso para mi padre y para mí. Así fue que entré en contacto con la Divina Misericordia, que años atrás me había atrapado a través de una imagen (Jesús en Vos confío).
Mi padre, por intercesión de mi madre, accedió a rezar con ella todas las noches estas oraciones. Meses más tarde se produjo un gran cambio en mi padre, comenzó a decir que Jesús era su amigo. Pude acercarme a él nuevamente.
La Divina Misericordia no solo acercó a mi padre a Jesús, también me acercó nuevamente a Él y a mi padre. Nos tocó y salvó a todos.


XIV. El Templo de Dios

Mi escuela primaria la cursé en un Colegio Parroquial Católico Apostólico Romano. Solía escaparme a la Parroquia, cuando nadie me veía, para poder gozar de una alegría para mi desconocida. Era algo que sentía únicamente estando dentro del Templo, una paz y una alegría que me llenaban el Alma. Como era muy pequeño no me cuestionaba demasiado el asunto. Pensaba: ahora entiendo a los sacerdotes, se dedican a ello para poder disfrutar de la alegría de poder estar aquí adentro (de la parroquia) la mayor cantidad de tiempo posible. Era un pensamiento infantil, simple pero muy fuerte, que terminó despertando en mí la vocación sacerdotal. No fui sacerdote porque durante mi adolescencia otros deseos arribaron a mi Alma. De cualquier forma lo que aprendí con claridad es que en el Templo de Dios, habita Dios y que Eso puede ser percibido.